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El té es la infusión más consumida del mundo. Es 100% natural y cuenta con muchísimas propiedades beneficiosas para la salud, además de tener ese efecto relajante que a veces necesitamos. El efecto antioxidante es una de sus propiedades más potentes, ya que combate el envejecimiento, posee efectos antiinflamatorios y combate el hipertiroidismo.
Como ya muchos sabréis, el té ayuda a prevenir las enfermedades cardiovasculares y disminuye el riesgo de padecer cáncer por sus flavonoides, dos sustancias antioxidantes.
Por todas sus propiedades es común incluir el té en una dieta para bajar de peso. Su efecto termogénico es ideal para acompañar estas dietas, ya que contribuye a que disminuya la absorción de grasa en nuestro organismo, además de acelerar el metabolismo.
Todos estos beneficios son algo que prácticamente todos los que toman té saben, pero hay muchas otras propiedades y curiosidades que pocos conocen y que te harán que comprar té sea mucho más interesante.
5 curiosidades sobre el té
1. Todos los tés provienen de la misma planta.
A pesar de la variedad de té que hay, todos provienen de la planta Camellia Sinensis, aunque tienen calidades diferentes. Los que están fabricados con las hojas y brotes de arriba son de máxima calidad y según va descendiendo su altura, disminuye también la calidad del té. La variedad también cambia por el tratamiento al que se someten las hojas durante todo el proceso de fabricación del té, desde su cosecha hasta su elaboración.
2. Solo hay 6 tipos de tés
Los infinitos nombres que has leído de tés realmente son mezclas entre estos. Solo existen 6 tipos de tés principales: blanco, verde, azul, amarillo, rojo y negro, y a partir de ahí se hacen incontables combinaciones. Para obtener cada variedad de té hay que trabajar la hoja de una manera determinada, la forma más clara de diferenciarlos es por el grado de fermentación.
3. La invención de las bolsas de té fue accidental
Thomas Sullivan, uno de los mercaderes de té más importantes del mundo, empezó a enviar muestras de té a sus clientes en bolsas de seda. Estas bolsitas debían ser quitadas antes de preparar el té, pero los clientes se equivocaron y al considerarlas útiles ya se quedaron.
4. La creación del té también fue algo casual
Según cuenta la leyenda china, un día hace unos 5.000 años el emperador Sheng-Nung se sentó bajo la sombra de un árbol a descansar y hervir agua (él mismo puso una norma en toda China que ordenaba hervir el agua antes de tomarla para evitar la contaminación) cuando varias hojas cayeron en su taza por casualidad. El emperador disfrutó del fortuito té y de las buenas sensaciones que este le causó así que ordenó plantar semillas de ese árbol silvestre.
5. La teína y la cafeína son lo mismo
Si no lo sabías no te preocupes, estos dos nombres están tan extendidos que pocos conocen que realmente vienen exactamente de la misma molécula. Esta confusión se remonta a su descubrimiento. Cuando se conoció la cafeína a principios del siglo XIX, se dio por hecho que era una sustancia diferente a la del té (que había sido descubierto mucho antes) por lo que se le puso un nombre distinto y ya se ha quedado asociada la cafeína para el café y teína para el té. La diferencia real es la cantidad de esta molécula que podemos encontrar en cada bebida, siendo mucho mayor en el café.
El té es una bebida mágica, con muchas historias y leyendas alrededor, hoy hemos querido haceros conocer alguna de estas, pero necesitaríamos millones de páginas para contar todas. ¿Cuántas de estas curiosidades conocías ya?